
Un hombre, en el museo del Prado, contemplaba el “Jardín de las Delicias” de El Bosco. Empezó a retroceder para ver el aspecto general del cuadro, y reculando, tropezó con una loseta mal puesta, cayendo de espaldas. Se desmayó.
Durante el desmayo se le apareció un angelito, diciendo que tenía la oportunidad de seguir uno de los tres caminos, el paraíso, el caos o el infierno. Cuando iba a decidir, se despertó.
Resultado: Seis mil euros de indemnización, porque se le apareció otro angelito con un diagnóstico falso de esguince cervical y otro angelito con una demanda al Ministerio de Cultura.
Durante el desmayo se le apareció un angelito, diciendo que tenía la oportunidad de seguir uno de los tres caminos, el paraíso, el caos o el infierno. Cuando iba a decidir, se despertó.
Resultado: Seis mil euros de indemnización, porque se le apareció otro angelito con un diagnóstico falso de esguince cervical y otro angelito con una demanda al Ministerio de Cultura.
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